Para referirnos a bandas altas como la de 2,6 GHz (2.500 MHz), es importante marcar la diferencia entre las bandas de frecuencia más baja (menores a 1 GHz) que resultan adecuadas para el despliegue de redes de amplia cobertura a un costo relativamente más bajo, y el uso de frecuencias más altas (como por ejemplo, 2,6 GHz) que tienen un mayor costo de cobertura, pero son más adecuadas para proporcionar la capacidad necesaria para satisfacer la demanda de altas velocidades de transferencia de datos del gran número de usuarios de las zonas urbanas, aeropuertos y otros lugares muy concurridos.
La banda de 2,6 GHz tiene el potencial de ser utilizada por servicios de banda ancha móvil en todo el mundo por igual, ofreciendo de este modo economías de escala a nivel mundial para los fabricantes de equipos, lo cual les permite reducir el costo de los dispositivos y de la infraestructura de red y convertirse en la banda común a nivel mundial para los servicios comerciales de banda ancha móvil.
Los países de la región que ya tienen asignada la Banda de 2,6 MHz para servicios móviles son: Colombia, Venezuela, Brasil y Chile y próximamente México, Argentina y Honduras. En Europa es utilizada en Reino Unido, Holanda, Rusia, Suecia, España, Italia, Francia, Alemania, Turquía, Grecia, Hungría, Eslovenia, entre otros. En Asia, China, Malasia y Japón son algunos de los países que también asignaron la banda para servicios móviles. Para más información ver “La Banda de 2,6 GHz: oportunidad para lograr una Banda Ancha móvil global”.