La GSMA reclama que el espectro Sub-700MHz se atribuya urgentemente a servicios móviles en América Latina

La demanda de datos móviles en América Latina creció tan rápido que enfrentamos una escasez de espectro en toda la región. De acuerdo a Cisco, el tráfico de datos móviles aumentará a una tasa de crecimiento anual compuesto de 59 por ciento en la región entre 2014 y 2019. GSMA Intelligence pronostica que, para 2020, habrá 956 millones de conexiones móviles en América Latina, de las cuales el 80 por ciento serán conexiones 3G y 4G.

Sin el aumento en asignación de espectro para la industria móvil, las redes no tendrán la capacidad para cubrir la creciente demanda de uso de datos de los consumidores y los negocios. Un déficit de espectro pondría en riesgo la floreciente economía móvil de América Latina, junto a todos los empleos, la innovación y la prosperidad que la acompañan. El informe Economía Móvil América Latina 2014 de la GSMA calcula que la contribución económica de la industria móvil latinoamericana continuará creciendo a una tasa más alta que el resto de la economía, alcanzando 4,5 por ciento del Producto Interno Bruto para 2020.

En la Conferencia Mundial de Radiocomunicaciones (WRC-15) de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) de noviembre de 2015, los países de la región encontrarán una oportunidad única para ayudar a asegurar el futuro de la banda ancha móvil de la región. Para lograrlo, la GSMA urge a los gobiernos y los reguladores a identificar y atribuir de modo primario la banda sub-700 MHz para servicios móviles.

La banda sub-700MHz en América Latina está atribuida a título primario a servicios de radiodifusión, y es fundamental para la transmisión a TV digital que se está desarrollando en toda la región. Sin embargo, esta banda no está siendo utilizada en su totalidad para la transmisión de TV en vivo, lo cual implica que existe espacio que puede ser liberado para el uso de servicios móviles sin impactar en los servicios de radiodifusión ya mirados.

La atribución co-primaria otorgará a cada país la flexibilidad de elegir cómo asignar el espectro en el futuro, para permitir que los consumidores accedan al contenido de la forma que deseen. Si los datos móviles continúan creciendo como se prevé, los gobiernos nacionales podrán optar por reasignar mayor cantidad de espectro a la industria móvil si así lo necesitan.

Esto tiene razones socioeconómicas convincentes. La banda sub-700MHz se extiende un 20 por ciento más allá de los 700MHz, lo cual la hace ideal para aumentar la cobertura de los servicios de banda ancha móvil, especialmente en áreas rurales. Y un estudio reciente indica que el uso de la banda 470-698MHz para banda ancha móvil en América Latina podría contribuir hasta 49.000 millones de dólares al Producto Interno Bruto de la región y crear más de 47.000 nuevos empleos.

La próxima reunión regional de la CITEL (Comisión Interamericana de Telecomunicaciones), preparatoria para la WRC-15, tendrá lugar en Ottawa, Canadá, del 17 al 21 de agosto. Es fundamental que cada mercado capitalice esta plataforma para acordar una posición común en la WRC-15, en pos de aumentar la asignación primaria en la banda sub-700MHz.

Si la acción no comienza ahora, existe la posibilidad muy real de que América Latina no podrá liberar el espectro necesario para alcanzar la demanda móvil de los consumidores y los negocios hasta 2030, o incluso más adelante.